La situación actual en el Medio Oriente es inestable, lo que ha llevado a un aumento en los precios internacionales del petróleo. Sin embargo, es interesante que las expectativas del mercado financiero sobre la restauración de la política de reducción de tasas de interés de la Reserva Federal en septiembre siguen siendo sólidas, con una probabilidad que se mantiene en alrededor del 55%.

Este fenómeno indica que los inversores generalmente creen que, antes de que los datos del índice de precios al consumidor (CPI) se vean significativamente afectados, el aumento de los precios del petróleo provocado por la actual crisis política en la región de Oriente Medio puede no tener una sostenibilidad a largo plazo.

En otras palabras, parece que los mercados financieros juzgan que el impacto real de la volatilidad de los precios del petróleo sobre la inflación no se manifestará claramente antes de septiembre. Este juicio podría influir en las estrategias de inversión y en la dirección de las políticas económicas en los próximos meses.