El famoso inversor Warren Buffett, de 94 años, respondió a la última pregunta y, al soltar el micrófono, el aplauso del público inundó el techo de Omaha.
En ese momento, de repente comprendí el peso del tiempo.
Este legendario que ha dirigido un imperio de riqueza durante sesenta años, ha entregado el poder a su sucesor Greg Albert. En una reunión de accionistas de cuatro horas, no hubo predicciones sobre la ola de IA ni sobre las fluctuaciones del mercado de valores, solo un sabio anciano que, con cinco principios muy simples, dejó al mundo la verdad de la vida que trasciende el tiempo. Estas palabras de gran simplicidad pueden ser más valiosas que cualquier secreto de inversión.
La primera regla es que la inversión con mayor retorno en la vida es elegir a la pareja adecuada. Buffett ha estado junto a su esposa durante 52 años y ha declarado que sin el apoyo de la familia, no podría hacer nada bien. Elegir una pareja es elegir el guion de la vida para la segunda mitad.
La segunda es buscar un trabajo que te permita ir a trabajar saltando y haciendo tap dance. Dijo que intentes encontrar lo que realmente quieres hacer; si no tienes prisa por el dinero, busca ese trabajo que no paga mucho pero que estarías dispuesto a hacer. Si aún no lo has encontrado, sigue haciendo el trabajo que te da de comer, ya que tienes que mantenerte. Sin embargo, no debes rendirte, sigue explorando, eventualmente encontrarás lo que buscas, porque la pasión traerá una energía interminable.
Tercero, en lugar de vaciar la billetera para comprar una casa, es mejor comprar activos que generen dinero. La casa que Buffett compró en 1958, donde vive hasta ahora, sugiere de manera muy directa que en lugar de encerrar el dinero en concreto y acero, es mejor invertir en acciones de calidad u otros activos que puedan seguir apreciándose, dejando que el dinero trabaje para ti.
Cuarto, en lugar de vigilar el gráfico de velas, es mejor prestar atención a las personas que te rodean. El rumbo de tu vida depende en gran medida de las personas a tu alrededor. Observa a Buffett y Charlie Munger, dos sabios de primer nivel, que se han logrado mutuamente durante medio siglo; al caminar con personas excelentes, te encontrarás inconscientemente ascendiendo a mayores alturas.
La última arma definitiva contra la frustración es aprender a filtrar el dolor. La mejor manera de enfrentar las dificultades es centrarse solo en las cosas buenas de la vida.
La felicidad, según Buffett, es muy simple: un hogar cálido, unos pocos amigos de confianza, un medio de transporte y una casa propia, eso es suficiente. En estas palabras no hay términos profundos, ni fórmulas complejas, pero esconden una sabiduría que trasciende el tiempo.
La leyenda de la riqueza de Buffett en 60 años nos dice que el verdadero éxito nunca es una búsqueda desesperada, sino saber cuándo hacer sacrificios.
La era de Buffett quizás esté desapareciendo, pero esta sabiduría y principios que atraviesan el tiempo permanecerán para siempre en nuestros corazones. (transición)
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El famoso inversor Warren Buffett, de 94 años, respondió a la última pregunta y, al soltar el micrófono, el aplauso del público inundó el techo de Omaha.
En ese momento, de repente comprendí el peso del tiempo.
Este legendario que ha dirigido un imperio de riqueza durante sesenta años, ha entregado el poder a su sucesor Greg Albert. En una reunión de accionistas de cuatro horas, no hubo predicciones sobre la ola de IA ni sobre las fluctuaciones del mercado de valores, solo un sabio anciano que, con cinco principios muy simples, dejó al mundo la verdad de la vida que trasciende el tiempo. Estas palabras de gran simplicidad pueden ser más valiosas que cualquier secreto de inversión.
La primera regla es que la inversión con mayor retorno en la vida es elegir a la pareja adecuada. Buffett ha estado junto a su esposa durante 52 años y ha declarado que sin el apoyo de la familia, no podría hacer nada bien. Elegir una pareja es elegir el guion de la vida para la segunda mitad.
La segunda es buscar un trabajo que te permita ir a trabajar saltando y haciendo tap dance. Dijo que intentes encontrar lo que realmente quieres hacer; si no tienes prisa por el dinero, busca ese trabajo que no paga mucho pero que estarías dispuesto a hacer. Si aún no lo has encontrado, sigue haciendo el trabajo que te da de comer, ya que tienes que mantenerte. Sin embargo, no debes rendirte, sigue explorando, eventualmente encontrarás lo que buscas, porque la pasión traerá una energía interminable.
Tercero, en lugar de vaciar la billetera para comprar una casa, es mejor comprar activos que generen dinero. La casa que Buffett compró en 1958, donde vive hasta ahora, sugiere de manera muy directa que en lugar de encerrar el dinero en concreto y acero, es mejor invertir en acciones de calidad u otros activos que puedan seguir apreciándose, dejando que el dinero trabaje para ti.
Cuarto, en lugar de vigilar el gráfico de velas, es mejor prestar atención a las personas que te rodean. El rumbo de tu vida depende en gran medida de las personas a tu alrededor. Observa a Buffett y Charlie Munger, dos sabios de primer nivel, que se han logrado mutuamente durante medio siglo; al caminar con personas excelentes, te encontrarás inconscientemente ascendiendo a mayores alturas.
La última arma definitiva contra la frustración es aprender a filtrar el dolor.
La mejor manera de enfrentar las dificultades es centrarse solo en las cosas buenas de la vida.
La felicidad, según Buffett, es muy simple: un hogar cálido, unos pocos amigos de confianza, un medio de transporte y una casa propia, eso es suficiente. En estas palabras no hay términos profundos, ni fórmulas complejas, pero esconden una sabiduría que trasciende el tiempo.
La leyenda de la riqueza de Buffett en 60 años nos dice que el verdadero éxito nunca es una búsqueda desesperada, sino saber cuándo hacer sacrificios.
La era de Buffett quizás esté desapareciendo, pero esta sabiduría y principios que atraviesan el tiempo permanecerán para siempre en nuestros corazones. (transición)