El bull run sigue en curso, pero el retroceso es inevitable.

En el gráfico ya han aparecido claramente tres señales de un techo histórico definido.
1. Indicadores adelantados (trimestral) — Se espera que la próxima señal aparezca en noviembre de 2025.
2. El RSI semanal muestra debilidad: se ha formado una divergencia bajista.
3. La tasa de rendimiento a corto plazo se desploma: ya han comenzado a aparecer señales preliminares.
Punto clave: esto no significa que ya se haya alcanzado el máximo. Por el contrario, el ciclo histórico indica que, después de que aparecen tales señales, el mercado suele tener un último empuje.
En esta "última etapa", el índice Dow Jones ha subido un 24%. En comparación, las últimas oleadas de impulso final han traído aumentos del 30% al 54%.
Por lo tanto, me mantengo alcista para el cuarto trimestre.
Pero debemos estar despiertos: el retroceso eventualmente llegará. La recesión eventualmente llegará. La única pregunta es, ¿cuánta energía podrá extraer el mercado en esta última fase?
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