¡Vaya tontería esto de tirar monedas online! Una reflexión personal

¡Madre mía! Cuando me encontré buscando cómo lanzar una moneda virtual en Google, jamás imaginé el circo tecnológico que hay detrás de algo tan simple. ¿De verdad necesitamos tantas aplicaciones y webs solo para decidir entre dos opciones? ¡Qué absurdo!

Yo, que siempre llevo algunas monedas en el bolsillo (por si acaso), me río cuando veo a la gente complicándose tanto la vida. Pero bueno, os cuento mi experiencia con estas herramientas digitales que supuestamente "modernizan" algo que lleva funcionando perfectamente desde hace milenios.

La farsa de los "generadores aleatorios"

Primero intenté con Google escribiendo "tira una moneda" y sí, apareció una monedita virtual. ¿Pero realmente es aleatoria? ¡Ja! Estos algoritmos están programados por humanos y seguro que tienen sus sesgos. Me niego a creer que sea tan imparcial como dicen.

Luego probé esas webs especializadas tipo FlipSim... ¡Menudo espectáculo! Animaciones exageradas, efectos de sonido irritantes... ¿Y para qué? Para ver si sale cara o cruz. ¡Ridículo!

Las apps: otro negocio más para sacarnos los cuartos

¡Y las aplicaciones móviles! ¿En serio? ¿Descargar una app que ocupa espacio en mi móvil solo para esto? Encima la mayoría están plagadas de publicidad. Te pasas más tiempo cerrando anuncios que tomando decisiones.

Lo peor es que algunas presumen de poder lanzar la moneda "10.000 veces". ¿Quién necesita lanzar una moneda tantas veces? Suena a excusa para tenerte más tiempo expuesto a sus anuncios.

La estafa de las "monedas blockchain"

Y ahora hasta mencionan que "la tecnología blockchain se está explorando para agregar transparencia". ¡Venga ya! Como si necesitáramos una cadena de bloques para confirmar si ha salido cara o cruz. Es el colmo de la estupidez tecnológica moderna.

Mi veredicto personal

Si de verdad necesitas tomar una decisión importante, agarra una moneda real. Si no tienes una, pregúntale a cualquier persona cerca de ti. Es más rápido, más auténtico y no requiere conexión a internet.

Este mundillo de simuladores de monedas es otro ejemplo más de cómo complicamos lo simple por puro afán consumista. Las empresas han visto otra oportunidad para meterse en nuestros bolsillos con algo tan básico como lanzar una moneda.

Y lo peor es que luego pretenden vendernos esto como "innovación" o "adaptación a la era digital". ¡Patrañas! Es solo otra forma de mantenernos pegados a las pantallas.

¿Alguien más piensa que estamos perdiendo el norte con tantas tonterías tecnológicas?