El conocido periodista financiero Nick Timiraos revela que en el interior de La Reserva Federal (FED) se está gestando una rara divergencia de políticas.

¿Cuál es el núcleo del problema? Incluso si en la reunión de diciembre se reduce la tasa de interés como se esperaba, Powell enfrentará la mayor resistencia interna en casi ocho años. Se rumorea en el mercado que en esta reunión podría haber una rara situación de "tres votos en contra"—hay que tener en cuenta que esta división ha sido extremadamente rara en los últimos 30 años de la historia de decisiones de la Reserva Federal (FED).

Los analistas de Evercore incluso no dudan en decir que el mecanismo de toma de decisiones del comité ha comenzado a mostrar fisuras. Esta divergencia probablemente continuará hasta 2026.

Más sutil es el juego en el ámbito político. Se espera ampliamente que en mayo del próximo año haya cambios en el personal, y que el nuevo presidente acelerará el ritmo de las reducciones de tasas de interés. Pero la realidad puede no ser tan simple: cambiar a las personas no significa cambiar la política; con un comité seriamente dividido, cualquier persona que tome el timón es un asunto espinoso.

¿Cuál es el peor de los casos? Si las expectativas de política fallan, podría desencadenar una intervención más radical en la independencia del banco central. En ese momento, la decisión sobre las tasas de interés ya no será una consideración puramente económica.

¿Está a punto de llegar a su fin la era de consenso de tasas de interés de 30 años? El mercado aún está a la espera, y la volatilidad de los activos criptográficos podría ampliarse aún más como resultado. Después de todo, una vez que las expectativas de liquidez se desestabilizan, los activos de riesgo son los primeros en verse afectados.