El mundo Cripto ahora está en un gran pánico, pero la historia nos dice que esto podría ser un punto de inflexión.

BTC, ETH y SOL han tenido una caída bastante fuerte en los últimos meses, el índice de miedo ha alcanzado niveles máximos, igual que durante el colapso de FTX y el desplome por el COVID. Mucha gente cree que ha llegado el mercado bajista y que es hora de un rug pull.

Pero al mirar los datos históricos: desde 2017, BTC ha experimentado más de 10 caídas del 25% o más, de las cuales 6 han caído más del 50% y 3 se acercaron al 75%. Cada vez, al final, se recupera a un nuevo máximo. Lo que duele más es que el miedo extremo a menudo es el preludio de un fuerte rebote — así fue en abril de este año.

Lógica principal: El ciclo del mundo de las criptomonedas suele ser “subida loca → reinicio rápido → larga espera → nuevo comienzo”. Ahora estamos en “reinicio rápido”. Si la historia se repite, lo siguiente es el “período de duda”, donde todos son expulsados del mercado por el aburrimiento y la desesperación. Pero este es precisamente un buen momento para posicionarse.

Señales favorables: Aunque el precio está en caída, el valor total de mercado de RWA (tokenización de activos físicos) ha aumentado un 2.3% en los últimos 30 días, alcanzando ahora los 3,570 millones de dólares. Estas infraestructuras se están acumulando en silencio.

Puntos de riesgo: Inestabilidad en la cima del mercado de valores, sobrevaloración de acciones de IA, incertidumbre en políticas comerciales, expectativas de tasas de interés volátiles—todo esto está drenando activos de riesgo. Si realmente hay problemas económicos, la corrección podría transformarse en un verdadero Mercado bajista.

Experiencia histórica: En la historia del mundo cripto, aquellos que se atrevieron a “comprar en el fondo” o que mantuvieron inversiones periódicas, al final ganaron. BTC, SOL, ETH pueden caer a corto plazo, pero no desaparecerán a largo plazo. Si a principios de año tenías confianza en ellos, ahora es una oportunidad para aumentar tus posiciones.

Hay que decirlo, el pánico y la oportunidad a menudo están separados solo por una mentalidad.