Se rumorea que el Secretario del Tesoro, Scott Bessent, podría estar a punto de conseguir un nuevo puesto: liderar la política económica directamente desde la Casa Blanca. Bloomberg reveló esta información el miércoles, citando a personas familiarizadas con las discusiones internas en curso.

Si este movimiento se materializa, Bessent asumiría el papel de principal asesor económico bajo la actual administración. Es el tipo de cambio que podría generar repercusiones en los círculos políticos, especialmente si se tiene en cuenta cómo las decisiones del Tesoro se entrelazan con todo, desde la estrategia fiscal hasta los marcos regulatorios.

Lo interesante aquí no es solo el cambio de personal, sino el momento en el que ocurre y lo que señala sobre hacia dónde podrían dirigirse las prioridades económicas. Estas conversaciones entre bastidores suelen indicar que se avecina algo más grande, ya sea un cambio de enfoque o un intento de consolidar la influencia sobre decisiones clave.

Habrá que estar atentos a cómo se desarrolla la situación. Cuando se reorganizan puestos de liderazgo a este nivel, los mercados suelen prestar atención.