Más allá de las imágenes de perfil, los NFT desbloquean muchas más posibilidades de las que la mayoría de la gente se da cuenta. Las aplicaciones potenciales abarcan un espectro increíblemente amplio.

Activos del mundo real: piensa en coleccionables como cartas de Pokemon o derechos de propiedad tokenizados en la cadena. La música y el arte pueden ser monetizados y poseídos directamente. Propiedad intelectual, memes, pases de membresía, programas de lealtad. Los PFPs también, por supuesto. Artículos de juegos, moda digital, entradas para eventos, certificados de autenticación. La lista realmente sigue expandiéndose.

Lo que se está volviendo claro es que la utilidad de los NFT no se trata del ciclo de hype. Se trata de resolver problemas reales de propiedad y transferencia en docenas de industrias. Aún estamos en las primeras etapas de lo que esta tecnología permite.