Una amiga que hace trading recientemente revisó sus estados de cuenta de activos de los últimos tres años y encontró algo un poco irónico.
"Tres años de operaciones, entrando y saliendo sin parar, y al final lo que más dinero me ha dado son los bonos del Estado que compré hace tres años y Bitcoin, que la mayor parte del tiempo simplemente estaban allí, sin tocarlos." Dice esto mientras sacude la cabeza.
Estas palabras tocan el punto sensible de cada inversor. Los activos en los que más confiamos suelen ser los menos líquidos. Las operaciones más frecuentes, en cambio, suelen tener resultados bastante mediocres.
El problema está aquí: si compras bonos del Estado, obtienes un rendimiento anual del 5%, pero tienes que mantenerlo hasta el vencimiento. Si acumulas Bitcoin, confías en su apreciación a largo plazo, pero ¿qué pasa si necesitas dinero urgentemente? ¿Vendes los bonos? No solo el proceso es lento, sino que también pierdes intereses sin necesidad. ¿Vendes Bitcoin? Si pierdes la próxima tendencia, te arrepentirás mucho. El sistema financiero tradicional siempre nos enseña a elegir entre dos: o tienes esto o aquello, no se puede tener todo.
Pero ahora surge una nueva idea.
La lógica central es muy sencilla: pones tus activos (como tokens de bonos del Estado, Bitcoin, etc.) en un protocolo en la cadena, y en unos minutos te genera una cantidad equivalente en stablecoins. Con las stablecoins, puedes invertir o gastar libremente, y aprovechar cualquier oportunidad que surja de repente. Al mismo tiempo, tus activos originales siguen allí, apreciándose y generando más beneficios.
Desde otra perspectiva, es como si—resguardaras tu casa en una hipoteca con el banco, pero sigues viviendo en ella. Cuando sube el valor de la propiedad, tú ganas. Solo que en la cadena, todo este proceso se completa en minutos, es transparente y sin la burocracia de los bancos.
Este diseño aborda directamente los puntos débiles de la gestión de activos tradicional. La liquidez y la rentabilidad ya no son una elección excluyente. Puedes tener ambas cosas: mantener tus activos en reposo y generando ingresos, mientras conservas la flexibilidad para aprovechar oportunidades del mercado. Para los inversores que valoran tanto el almacenamiento a largo plazo como la flexibilidad a corto plazo, esto abre nuevas posibilidades.
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NotFinancialAdviser
· hace8h
Ganar sin esfuerzo siempre es para los activos inactivos, esto es absurdo
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RealYieldWizard
· hace8h
La verdad, sé muy bien que mantener la posición sin moverla es en realidad la forma de ganar más. Operar con frecuencia en esas cosas llamativas al final no sirve de nada.
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ResearchChadButBroke
· hace8h
Vaya, ¿esto no es mi día a día... Operar con frecuencia en realidad me hace perder, quedarse quieto y no hacer nada en cambio hace ganar dinero, es demasiado duro de aceptar
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TheShibaWhisperer
· hace8h
Las propiedades inmobiliarias generan más ganancias, ¿qué significa esto? Cuanto más te esfuerzas, más pierdes.
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GasFeeNightmare
· hace8h
¿Ganar dinero tumbado y poder retirar en cualquier momento? Esa es la forma de inversión que quiero, no tener que estar mirando la pantalla todo el día y hacer operaciones a ciegas.
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DataOnlooker
· hace8h
Vencer sin esfuerzo es la verdadera estrategia, operar con frecuencia solo te trae problemas.
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ForkYouPayMe
· hace8h
Ganar dinero sin esfuerzo es la verdadera clave, operar con frecuencia es como pagar la matrícula
Una amiga que hace trading recientemente revisó sus estados de cuenta de activos de los últimos tres años y encontró algo un poco irónico.
"Tres años de operaciones, entrando y saliendo sin parar, y al final lo que más dinero me ha dado son los bonos del Estado que compré hace tres años y Bitcoin, que la mayor parte del tiempo simplemente estaban allí, sin tocarlos." Dice esto mientras sacude la cabeza.
Estas palabras tocan el punto sensible de cada inversor. Los activos en los que más confiamos suelen ser los menos líquidos. Las operaciones más frecuentes, en cambio, suelen tener resultados bastante mediocres.
El problema está aquí: si compras bonos del Estado, obtienes un rendimiento anual del 5%, pero tienes que mantenerlo hasta el vencimiento. Si acumulas Bitcoin, confías en su apreciación a largo plazo, pero ¿qué pasa si necesitas dinero urgentemente? ¿Vendes los bonos? No solo el proceso es lento, sino que también pierdes intereses sin necesidad. ¿Vendes Bitcoin? Si pierdes la próxima tendencia, te arrepentirás mucho. El sistema financiero tradicional siempre nos enseña a elegir entre dos: o tienes esto o aquello, no se puede tener todo.
Pero ahora surge una nueva idea.
La lógica central es muy sencilla: pones tus activos (como tokens de bonos del Estado, Bitcoin, etc.) en un protocolo en la cadena, y en unos minutos te genera una cantidad equivalente en stablecoins. Con las stablecoins, puedes invertir o gastar libremente, y aprovechar cualquier oportunidad que surja de repente. Al mismo tiempo, tus activos originales siguen allí, apreciándose y generando más beneficios.
Desde otra perspectiva, es como si—resguardaras tu casa en una hipoteca con el banco, pero sigues viviendo en ella. Cuando sube el valor de la propiedad, tú ganas. Solo que en la cadena, todo este proceso se completa en minutos, es transparente y sin la burocracia de los bancos.
Este diseño aborda directamente los puntos débiles de la gestión de activos tradicional. La liquidez y la rentabilidad ya no son una elección excluyente. Puedes tener ambas cosas: mantener tus activos en reposo y generando ingresos, mientras conservas la flexibilidad para aprovechar oportunidades del mercado. Para los inversores que valoran tanto el almacenamiento a largo plazo como la flexibilidad a corto plazo, esto abre nuevas posibilidades.