Ayer, junto con los amigos de la comunidad, participé en la actividad de apertura de cartas de la serie de hielo de Renaissance. La verdad es que mi suerte no fue muy buena: en 13 tiradas solo conseguí 1 carta C y 12 cartas D. Lo más divertido es que hay compañeros en la comunidad que fueron aún más desafortunados, con 13 tiradas seguidas todas cartas D. Esto se llama que no hay el más negro, sino aún más negro.

Pero hablando en serio, el proyecto Renaissance ha puesto esfuerzo en el diseño del mecanismo de las cajas de cartas. Su enfoque principal es el concepto de «verdadera equidad», que se garantiza mediante tecnologías de cifrado y verificabilidad en la cadena de bloques. Específicamente, el proyecto utiliza el árbol de Merkle, una estructura criptográfica clásica, para asegurar que cada resultado de la apertura de cartas pueda ser verificado y rastreado en la cadena. De esta manera, ya no hay que preocuparse por manipulaciones ocultas, y el mecanismo de probabilidad es completamente transparente. Que te toque mala suerte no significa que el proyecto tenga mala intención.