El patrón que hizo explotar Meme todos lo han visto: en un instante, se llena de pantallas y, al girar, se enfría. ¿En qué radica la verdadera diferencia? No en cuán alta sea la popularidad, sino en si esa popularidad puede mantenerse.

La clave está en el detalle de la "ruta de participación". Si el umbral de participación es demasiado alto, el ritmo se estanca, y la falta de retroalimentación hace que, aunque haya muchas personas observando, solo estén viendo el espectáculo; la popularidad rápidamente pasa de ser acción a simple curiosidad. Por otro lado, si la participación es rápida, la entrada es directa y la interacción es coherente, la comunidad puede congregarse rápidamente durante la ventana de oportunidad, formando una verdadera densidad — esto es lo que puede mantenerse en la cadena de bloques de forma continua.

Ahora algunas plataformas comienzan a optimizar este camino. En realidad, lo que hacen es una sola cosa: hacer que toda la cadena de participación sea más fluida. Para los proyectos, esto significa un arranque en frío más eficiente. Para los participantes, es una entrada más clara para subir a bordo. La comunidad no vive solo de gritar consignas, sino de que cada interacción sea fluida y cada popularidad pueda consolidarse en acciones en la cadena. Esa es la verdadera respuesta a qué tan lejos puede llegar el ecosistema Meme.