Según las últimas actas de la reunión de la Reserva Federal, hay varios señales clave que vale la pena destacar. En primer lugar, la opinión de los miembros sobre la situación económica actual es bastante unificada: el ritmo de expansión, aunque estable, no es rápido, y se encuentra en un ritmo de crecimiento moderado. Los datos de empleo de este año muestran una desaceleración evidente, especialmente en septiembre, cuando la tasa de desempleo incluso aumentó, lo cual es una señal a tener en cuenta. La inflación es un poco más compleja; ha estado en aumento desde principios de año y todavía se mantiene en niveles elevados, sin señales claras de retroceso. Los miembros están especialmente atentos a estos fenómenos, especialmente en lo que respecta al empleo, y han mencionado claramente que los riesgos a la baja están aumentando. Considerando que la Reserva Federal busca tanto mantener el empleo como controlar la inflación, estas señales de riesgo realmente merecen la atención cercana de los participantes del mercado.