El acta de la reunión de diciembre de la Reserva Federal acaba de publicarse y la reacción del mercado ha sido tibia—esta bajada de tipos podría ser la última en el corto plazo.

Aunque la Junta de la Reserva Federal decidió finalmente reducir los tipos en 25 puntos básicos, las diferencias internas son severas. Seis miembros expresaron públicamente su oposición a esta bajada, principalmente por preocupaciones de que la inflación aún no ha vuelto a los niveles objetivos. Esto ya refleja un cambio de actitud claro en los responsables de la toma de decisiones.

Lo más impactante es la actualización del gráfico de puntos: la expectativa de recortes en 2026 pasó de varias a solo uno. En comparación con las expectativas optimistas del mercado anteriormente, esto es sin duda un golpe duro. En otras palabras, el período en el que los tipos se mantendrán en niveles relativamente altos será más largo.

La estrategia a seguir ya está bastante clara: mantener la calma y no hacer cambios. La mayoría de los miembros del comité prefieren esperar y ver, a menos que los datos económicos muestren señales claras de deterioro, en cuyo caso no descartan ajustar los tipos nuevamente. Los funcionarios incluso usaron una metáfora visual: debido al cierre del gobierno de EE. UU., los datos estadísticos están interrumpidos, ahora es como conducir en una niebla espesa, donde la prudencia es necesaria cuando no se puede ver claramente el camino.

Sin embargo, la Reserva Federal no ha detenido completamente su política. Para prevenir riesgos de liquidez, han activado anticipadamente su plan de expansión de balance, comprando 400 millones de dólares en bonos a corto plazo cada mes para mantener la liquidez del mercado. Es un equilibrio delicado: pausar el ciclo de subidas de tipos, pero asegurando que los mercados financieros no se queden sin dinero.

¿Qué significa esto para los inversores que poseen activos como BTC, ETH, BNB, etc.? Un entorno de tipos altos podría prolongarse más tiempo, y la tendencia de activos de riesgo a corto plazo seguirá siendo difícil de revertir. El mercado aún necesita esperar señales más claras de enfriamiento económico para poder detectar nuevas oportunidades.