Si hoy reinicias tu carrera de inversión, debes recordar tres puntos: primero, sobrevive. Elimina deudas y celos, y construye un sistema que no te autodestruya. Segundo, acumula munición. Piensa como un propietario, soporta el aburrimiento y convierte tus ahorros en tus primeros empleados. Tercero, apuesta inteligentemente. Compra activos de calidad y luego quédate quieto, dejando que el tiempo y el interés compuesto trabajen para ti. Ninguno de estos tres principios es rápido, ninguno es emocionante, e incluso cada uno suena aburrido, pero son efectivos; funcionaron en 1946, en 1976, y siguen siendo efectivos hoy, en los próximos 100 años. Porque no están basados en predecir el mercado, sino en vencer la naturaleza humana, y la naturaleza humana nunca cambia.
Ver originales
Esta página puede contener contenido de terceros, que se proporciona únicamente con fines informativos (sin garantías ni declaraciones) y no debe considerarse como un respaldo por parte de Gate a las opiniones expresadas ni como asesoramiento financiero o profesional. Consulte el Descargo de responsabilidad para obtener más detalles.
Si hoy reinicias tu carrera de inversión, debes recordar tres puntos: primero, sobrevive. Elimina deudas y celos, y construye un sistema que no te autodestruya. Segundo, acumula munición. Piensa como un propietario, soporta el aburrimiento y convierte tus ahorros en tus primeros empleados. Tercero, apuesta inteligentemente. Compra activos de calidad y luego quédate quieto, dejando que el tiempo y el interés compuesto trabajen para ti. Ninguno de estos tres principios es rápido, ninguno es emocionante, e incluso cada uno suena aburrido, pero son efectivos; funcionaron en 1946, en 1976, y siguen siendo efectivos hoy, en los próximos 100 años. Porque no están basados en predecir el mercado, sino en vencer la naturaleza humana, y la naturaleza humana nunca cambia.