He estado dándole vueltas a esta cuestión y no puedo evitar sentir cierta frustración con tanto experto vendiendo "seguridad adicional" que realmente no necesitamos. Vamos a ver la realidad.
La seguridad de nuestras carteras crypto depende de esas dichosas frases-semilla. Todos hemos pasado por el sudor frío de anotar estas palabras y rezar para no perderlas jamás.
Las de 12 palabras tienen 128 bits de entropia - un número tan astronómico de combinaciones que es prácticamente imposible de romper con la tecnología actual. Las de 24 palabras? 256 bits. Suena impresionante, ¿verdad?
Pero aquí está el engaño: la criptografía de curva elíptica que usan nuestras queridas criptomonedas tiene una seguridad efectiva de 128 bits. Da igual si usas 12 o 24 palabras, el límite práctico sigue siendo el mismo. ¡Estamos añadiendo peso a la mochila sin ganar velocidad!
Adam Back, el CEO de Blockstream (y uno que realmente entiende de esto), lo dice claro: 12 palabras son más que suficientes. Las empresas que nos empujan a usar 24 están vendiendo una falsa sensación de seguridad.
El verdadero problema nunca ha sido el número de palabras, sino cómo diablos guardamos la semilla. ¿De qué me sirven 24 palabras si las tengo pegadas en una nota bajo el teclado? Una semilla de 12 palabras grabada en metal y guardada en un lugar seguro es infinitamente mejor que 24 palabras en un papel que tu compañero de piso podría encontrar.
Además, seamos sinceros: ¿quién no ha cometido errores al transcribir estas malditas palabras? Con 12 ya es un dolor de cabeza, con 24 es una tortura.
Hay excepciones, claro. Si eres una institución manejando millones, tal vez quieras ese extra de tranquilidad. Wei Dai señala que en entornos multiusuario masivos, las limitaciones comienzan a aparecer con las semillas más cortas.
Lo que me parece interesante es que algunos desarrolladores ya ofrecen opciones personalizables: 12, 18 o 24 palabras. Incluso hay sistemas como Shamir Secret Sharing con 20 o 33 palabras.
Pero seamos realistas - para la mayoría de nosotros, 12 palabras bien protegidas son más que suficientes. No nos dejemos engañar por el marketing del miedo.
La próxima vez que alguien te diga que necesitas más palabras, pregúntate: ¿realmente necesito más seguridad teórica, o necesito mejorar cómo protejo lo que ya tengo?
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Las semillas de 24 palabras son mejores que las frases de seguridad de 12 palabras?
He estado dándole vueltas a esta cuestión y no puedo evitar sentir cierta frustración con tanto experto vendiendo "seguridad adicional" que realmente no necesitamos. Vamos a ver la realidad.
La seguridad de nuestras carteras crypto depende de esas dichosas frases-semilla. Todos hemos pasado por el sudor frío de anotar estas palabras y rezar para no perderlas jamás.
Las de 12 palabras tienen 128 bits de entropia - un número tan astronómico de combinaciones que es prácticamente imposible de romper con la tecnología actual. Las de 24 palabras? 256 bits. Suena impresionante, ¿verdad?
Pero aquí está el engaño: la criptografía de curva elíptica que usan nuestras queridas criptomonedas tiene una seguridad efectiva de 128 bits. Da igual si usas 12 o 24 palabras, el límite práctico sigue siendo el mismo. ¡Estamos añadiendo peso a la mochila sin ganar velocidad!
Adam Back, el CEO de Blockstream (y uno que realmente entiende de esto), lo dice claro: 12 palabras son más que suficientes. Las empresas que nos empujan a usar 24 están vendiendo una falsa sensación de seguridad.
El verdadero problema nunca ha sido el número de palabras, sino cómo diablos guardamos la semilla. ¿De qué me sirven 24 palabras si las tengo pegadas en una nota bajo el teclado? Una semilla de 12 palabras grabada en metal y guardada en un lugar seguro es infinitamente mejor que 24 palabras en un papel que tu compañero de piso podría encontrar.
Además, seamos sinceros: ¿quién no ha cometido errores al transcribir estas malditas palabras? Con 12 ya es un dolor de cabeza, con 24 es una tortura.
Hay excepciones, claro. Si eres una institución manejando millones, tal vez quieras ese extra de tranquilidad. Wei Dai señala que en entornos multiusuario masivos, las limitaciones comienzan a aparecer con las semillas más cortas.
Lo que me parece interesante es que algunos desarrolladores ya ofrecen opciones personalizables: 12, 18 o 24 palabras. Incluso hay sistemas como Shamir Secret Sharing con 20 o 33 palabras.
Pero seamos realistas - para la mayoría de nosotros, 12 palabras bien protegidas son más que suficientes. No nos dejemos engañar por el marketing del miedo.
La próxima vez que alguien te diga que necesitas más palabras, pregúntate: ¿realmente necesito más seguridad teórica, o necesito mejorar cómo protejo lo que ya tengo?