¡No te limites a mirar la reducción de tasas! La "manipulación del margen de puntos" de La Reserva Federal (FED) ya ha comenzado, y una reversión de liquidez silenciosa se está llevando a cabo.
La Reserva Federal anunció el 29 de octubre una reducción de tasas de interés de 25 puntos básicos, bajando el rango objetivo de la tasa de fondos federales al 3.75% al 4.00%, siendo esta la quinta reducción desde septiembre de 2024. Sin embargo, más que esta decisión que coincide con las expectativas del mercado, es digno de mención otro anuncio realizado por la Reserva Federal: que el 1 de diciembre finalizará su plan de reducción de balance. Esta política, conocida en el mercado como endurecimiento cuantitativo, ha reducido el tamaño del balance de la Reserva Federal desde un pico de casi 9 billones de dólares durante la pandemia a aproximadamente 6.6 billones de dólares. Su finalización sugiere que el entorno de liquidez global se enfrentará a un cambio significativo y profundo.
Cambio de política: de bombeo implícito a inyección moderada
La esencia de la reducción cuantitativa es que la Reserva Federal, al no renovar los bonos que vencen, retira silenciosamente liquidez del sistema financiero. Esta política comenzó en junio de 2022, cuando Estados Unidos enfrentaba problemas de alta inflación y la Reserva Federal necesitaba múltiples herramientas para ajustar las condiciones financieras. Durante tres años, la reducción cuantitativa (QT) y la política de aumento de tasas han formado un esfuerzo conjunto: por un lado, aumentando el precio del dinero y, por otro, reduciendo la cantidad de dinero disponible. Desde 2022, al permitir que parte de los bonos vencieran sin renovación, el balance de la Reserva Federal se ha reducido significativamente desde su máximo. Sin embargo, la situación está cambiando. A mediados de octubre de 2025, Powell advirtió en una conferencia en Filadelfia que había señales de un enfriamiento adicional en el mercado laboral de EE. UU. También señaló que, a medida que la liquidez en el sistema financiero se va ajustando gradualmente, el plan de reducción cuantitativa podría estar llegando a su fin. Dentro de la Reserva Federal ya se ha acordado adoptar un enfoque “muy cauteloso” para evitar la presión en el mercado monetario que se experimentó en septiembre de 2019. Terminar con la QT significa que la Reserva Federal dejará de retirar liquidez del sistema financiero y, en cambio, reinvertirá los ingresos de los valores que vencen, lo que en esencia es una reinyección de dinero en el mercado. Este cambio puede parecer un ajuste técnico, pero en realidad tiene un profundo impacto en la liquidez del mercado.
Lógica de decisión: medidas preventivas y estabilización del mercado
Detrás de la decisión de la Reserva Federal se encuentra una evaluación cautelosa sobre las perspectivas económicas y una consideración por la estabilidad del mercado. El juicio general transmitido por Powell en su discurso de octubre, de que “las preocupaciones sobre el empleo superan el riesgo de inflación”, se ha convertido en la base clave para el cambio de política de la Reserva Federal. A pesar de que la inflación sigue siendo superior al objetivo del 2% de la Reserva Federal, las expectativas de inflación a largo plazo siguen siendo coherentes con este objetivo. Las señales de enfriamiento en el mercado laboral son aún más evidentes; Powell señaló que “en este mercado laboral menos activo y algo débil, el riesgo a la baja para el empleo parece haber estado en aumento”. Los formuladores de políticas de la Reserva Federal reconocen que el “apagón” del gobierno federal, que ha durado casi un mes, ha limitado su proceso de toma de decisiones. La falta de datos oficiales dificulta que la Reserva Federal evalúe con precisión la situación económica, y esta incertidumbre también ha llevado a la Reserva Federal a adoptar una postura política más cautelosa. La decisión de poner fin a la QT también refleja la preocupación de la Reserva Federal por la liquidez del mercado. La Reserva Federal de Nueva York realizó operaciones de recompra a gran escala en septiembre para aliviar la presión de liquidez en el mercado monetario. Estas operaciones sugieren que las reservas del sistema bancario pueden haber caído cerca de su nivel mínimo cómodo, y una reducción adicional de la hoja de balance podría poner en peligro la estabilidad del mercado.
Impacto del mercado: la transferencia oculta de liquidez
El final de QT tendrá un impacto profundo y complejo en varios tipos de activos. Según el análisis del economista jefe de AVIC Securities, Dong Zhongyun, el final de la reducción del balance podría tener tres efectos principales: primero, se espera que la liquidez del mercado estadounidense mejore, evitando repetir la crisis del mercado de recompra de 2019; segundo, el final de la reducción del balance significa que la Reserva Federal dejará de reducir su tenencia de bonos, lo que aliviará la presión de venta en el mercado de bonos y ayudará a reducir los rendimientos a largo plazo; tercero, el final de la reducción del balance podrá aumentar las expectativas de flexibilización de la política monetaria, creando un efecto sinérgico con la reducción de tasas. A pesar de que la Reserva Federal anunció una reducción de tasas el 29 de octubre, los rendimientos de los bonos del gobierno a largo plazo siguieron aumentando. Este fenómeno aparentemente ilógico revela la divergencia del mercado sobre la futura trayectoria de la política. Powell señaló que los formuladores de políticas tienen “serias divergencias” sobre las acciones de diciembre, lo que hace que la dirección futura de la política esté llena de incertidumbres. Sin embargo, el final de QT podría tener un efecto de apoyo más directo en el mercado de valores. El final de QT significa que la presión de la Reserva Federal para retirar liquidez del mercado se reduce, lo que brindará apoyo a las acciones estadounidenses, especialmente a las acciones de crecimiento y tecnología que son más sensibles a la liquidez. Este punto de vista coincide con la opinión de Bill Adams, economista jefe de la Dallas Federal Reserve Bank, quien cree que el final de QT podría “convertirse en más liquidez en los mercados financieros y más fondos de inversión privada fluyendo hacia activos de riesgo en el futuro cercano”. Un cambio sutil: el efecto de “reducción de tasas implícita” del final de QT.
Algunos analistas creen que, incluso si la Reserva Federal pausa las reducciones de tasas en diciembre, el final anticipado de la QT podría tener un efecto similar al de una reducción de tasas. John Luke Tyner, gerente de cartera de Aptus Capital Advisors en Alabama, incluso considera que terminar la QT antes de 2026 podría proporcionar a los inversores un efecto equivalente a una reducción de 25 puntos básicos. Este efecto de “reducción de tasas implícita” se realiza principalmente a través de dos canales: primero, aliviando la presión básica sobre las reservas bancarias, y segundo, gestionando la oferta y la estructura de plazos de las emisiones de deuda del gobierno. El final de la QT significa que la Reserva Federal comprará parte de la oferta de deuda del gobierno directamente del mercado privado, cambiando el equilibrio de oferta y demanda del mercado. Sin embargo, no todos los analistas están de acuerdo con esta comparación directa. Derek Tang, economista de Washington Policy Analysis, sostiene que el final de la QT amplifica cualquier efecto de reducción de tasas al “fortalecer la aversión al riesgo en el mercado de valores”, pero considera que este movimiento de la Reserva Federal es más un “ajuste gradual” de la política del balance. La decisión de terminar la QT también está estrechamente relacionada con la estrategia de emisión de deuda del Tesoro de EE. UU. Will Compernolle, estratega macroeconómico de FHN Financial, señala que, tras el final de la QT, el Tesoro tiene mayor flexibilidad para aumentar el saldo de efectivo de su cuenta general, mientras que la Reserva Federal se convertirá en un “comprador voluntario, absorbiendo parte de la demanda de deuda del gobierno”.
Efectos de la liquidez del dólar en el ámbito global
El cambio en la política monetaria de la Reserva Federal nunca es solo un asunto interno de Estados Unidos; su efecto de contagio tendrá un profundo impacto en los mercados de capitales globales. La experiencia histórica muestra que el endurecimiento de la política monetaria de la Reserva Federal a menudo se acompaña de crisis financieras en mercados emergentes o a nivel global. Sin embargo, el final de esta ronda de QT podría ser beneficioso para los mercados emergentes. El cese de la flexibilización cuantitativa por parte de la Reserva Federal aliviará la presión de fuga de capitales que enfrentan los mercados emergentes, lo que ayudará a mejorar su entorno de financiamiento externo. A medida que se reduce la presión sobre la liquidez del dólar, el capital internacional podría volver a fluir hacia los mercados emergentes en busca de mayores rendimientos. La evolución del índice del dólar también se verá afectada. La reducción de tasas de interés que lleva a un estrechamiento de los diferenciales de interés entre Estados Unidos y el extranjero, debilitará aún más la atractividad del dólar, sumado a la “desdolarización” impulsada por las tensiones comerciales globales, lo que aumentará la presión sobre el índice del dólar. Este juicio es consistente con las predicciones de Franklin Templeton Investments, que anticipan que las preocupaciones sobre la inflación llevarán a que la magnitud de la reducción de tasas de la Reserva Federal sea inferior a lo esperado, y que el rango objetivo final de la tasa de política de esta ronda podría ser superior al 3.5%. El mercado de materias primas podría mostrar una tendencia divergente. El oro se beneficiará de la caída de las tasas de interés reales y el resurgimiento de la demanda de refugio, y su precio podría seguir aumentando; los precios del petróleo, por otro lado, seguirán siendo determinados por los fundamentos de oferta y demanda, la capacidad de implementación de los recortes de OPEP+ y los riesgos geopolíticos en Oriente Medio seguirán siendo las variables clave que determinen la dirección marginal del precio del petróleo, y el impacto de la reducción de tasas probablemente será relativamente limitado. Perspectivas futuras: la niebla del camino de políticas.
A pesar de que el QT está a punto de finalizar, el camino de política futura de la Reserva Federal sigue siendo incierto. Powell dijo en la conferencia de prensa posterior a la reunión de octubre que hay diferencias evidentes entre los funcionarios sobre cómo actuar en diciembre, y no es seguro que se reduzcan las tasas nuevamente en la reunión de diciembre. El calendario publicado en el sitio web de la Reserva Federal muestra que en 2025 habrá otra reunión de tasas de interés, que anunciará una nueva decisión de tasas el 11 de diciembre a la hora de Pekín. Esta reunión será más importante, ya que puede proporcionar más pistas sobre el camino de la política en 2026. Las predicciones de las principales instituciones sobre la dirección de la política futura de la Reserva Federal son divergentes. Morgan Stanley pronostica que la Reserva Federal continuará reduciendo las tasas hasta enero de 2026, y que habrá otras dos reducciones en abril y julio de 2026, llevando finalmente el rango objetivo de la tasa de fondos federales al 3.00% al 3.25%. Por otro lado, un informe de CICC sostiene que, bajo “circunstancias naturales”, se estima que la Reserva Federal aún tiene espacio para tres reducciones de tasas en esta ronda, lo que corresponde a tasas a largo plazo de 3.8 a 4.0%. La compañía también indicó que, aunque la Reserva Federal aún tiene cierto margen de flexibilización, el ritmo de las reducciones de tasas podría desacelerarse, y no es prudente tener expectativas excesivamente optimistas. Nuevas incertidumbres también están surgiendo. CICC señala que el nuevo presidente de la Reserva Federal y la independencia de la Reserva Federal son los mayores factores de incertidumbre en el camino de reducción de tasas del próximo año, lo que podría aumentar la incertidumbre política después del segundo trimestre de 2026. Este punto de vista sugiere que los factores políticos podrían tener un mayor impacto en la dirección futura de la política monetaria.
Los fondos del mercado monetario han alcanzado un récord de activos de 7.42 billones de dólares, cifra que refleja el deseo del mercado por rendimientos y la búsqueda de activos seguros. Tras el final de QT, estos gigantes de capital que han estado inactivos podrían reajustar su estrategia en busca de nuevos hábitats. La Reserva Federal finalizará el plan de QT el 1 de diciembre, pero Powell también ha dejado claro que no es seguro que haya un nuevo recorte de tasas en la reunión de diciembre. Esta actitud cautelosa es, en sí misma, un espejo que refleja el difícil equilibrio que enfrenta la Reserva Federal entre la inflación y el crecimiento, la falta de datos y las perspectivas de políticas. El telón del festín de liquidez se ha levantado lentamente, pero la duración del banquete y el efecto final dependerán del rumbo definitivo de los fundamentos económicos.
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¡No te limites a mirar la reducción de tasas! La "manipulación del margen de puntos" de La Reserva Federal (FED) ya ha comenzado, y una reversión de liquidez silenciosa se está llevando a cabo.
Escrito por: White55, Mars Finance
La Reserva Federal anunció el 29 de octubre una reducción de tasas de interés de 25 puntos básicos, bajando el rango objetivo de la tasa de fondos federales al 3.75% al 4.00%, siendo esta la quinta reducción desde septiembre de 2024. Sin embargo, más que esta decisión que coincide con las expectativas del mercado, es digno de mención otro anuncio realizado por la Reserva Federal: que el 1 de diciembre finalizará su plan de reducción de balance. Esta política, conocida en el mercado como endurecimiento cuantitativo, ha reducido el tamaño del balance de la Reserva Federal desde un pico de casi 9 billones de dólares durante la pandemia a aproximadamente 6.6 billones de dólares. Su finalización sugiere que el entorno de liquidez global se enfrentará a un cambio significativo y profundo.
Cambio de política: de bombeo implícito a inyección moderada
La esencia de la reducción cuantitativa es que la Reserva Federal, al no renovar los bonos que vencen, retira silenciosamente liquidez del sistema financiero. Esta política comenzó en junio de 2022, cuando Estados Unidos enfrentaba problemas de alta inflación y la Reserva Federal necesitaba múltiples herramientas para ajustar las condiciones financieras. Durante tres años, la reducción cuantitativa (QT) y la política de aumento de tasas han formado un esfuerzo conjunto: por un lado, aumentando el precio del dinero y, por otro, reduciendo la cantidad de dinero disponible. Desde 2022, al permitir que parte de los bonos vencieran sin renovación, el balance de la Reserva Federal se ha reducido significativamente desde su máximo. Sin embargo, la situación está cambiando. A mediados de octubre de 2025, Powell advirtió en una conferencia en Filadelfia que había señales de un enfriamiento adicional en el mercado laboral de EE. UU. También señaló que, a medida que la liquidez en el sistema financiero se va ajustando gradualmente, el plan de reducción cuantitativa podría estar llegando a su fin. Dentro de la Reserva Federal ya se ha acordado adoptar un enfoque “muy cauteloso” para evitar la presión en el mercado monetario que se experimentó en septiembre de 2019. Terminar con la QT significa que la Reserva Federal dejará de retirar liquidez del sistema financiero y, en cambio, reinvertirá los ingresos de los valores que vencen, lo que en esencia es una reinyección de dinero en el mercado. Este cambio puede parecer un ajuste técnico, pero en realidad tiene un profundo impacto en la liquidez del mercado.
Lógica de decisión: medidas preventivas y estabilización del mercado
Detrás de la decisión de la Reserva Federal se encuentra una evaluación cautelosa sobre las perspectivas económicas y una consideración por la estabilidad del mercado. El juicio general transmitido por Powell en su discurso de octubre, de que “las preocupaciones sobre el empleo superan el riesgo de inflación”, se ha convertido en la base clave para el cambio de política de la Reserva Federal. A pesar de que la inflación sigue siendo superior al objetivo del 2% de la Reserva Federal, las expectativas de inflación a largo plazo siguen siendo coherentes con este objetivo. Las señales de enfriamiento en el mercado laboral son aún más evidentes; Powell señaló que “en este mercado laboral menos activo y algo débil, el riesgo a la baja para el empleo parece haber estado en aumento”. Los formuladores de políticas de la Reserva Federal reconocen que el “apagón” del gobierno federal, que ha durado casi un mes, ha limitado su proceso de toma de decisiones. La falta de datos oficiales dificulta que la Reserva Federal evalúe con precisión la situación económica, y esta incertidumbre también ha llevado a la Reserva Federal a adoptar una postura política más cautelosa. La decisión de poner fin a la QT también refleja la preocupación de la Reserva Federal por la liquidez del mercado. La Reserva Federal de Nueva York realizó operaciones de recompra a gran escala en septiembre para aliviar la presión de liquidez en el mercado monetario. Estas operaciones sugieren que las reservas del sistema bancario pueden haber caído cerca de su nivel mínimo cómodo, y una reducción adicional de la hoja de balance podría poner en peligro la estabilidad del mercado.
Impacto del mercado: la transferencia oculta de liquidez
El final de QT tendrá un impacto profundo y complejo en varios tipos de activos. Según el análisis del economista jefe de AVIC Securities, Dong Zhongyun, el final de la reducción del balance podría tener tres efectos principales: primero, se espera que la liquidez del mercado estadounidense mejore, evitando repetir la crisis del mercado de recompra de 2019; segundo, el final de la reducción del balance significa que la Reserva Federal dejará de reducir su tenencia de bonos, lo que aliviará la presión de venta en el mercado de bonos y ayudará a reducir los rendimientos a largo plazo; tercero, el final de la reducción del balance podrá aumentar las expectativas de flexibilización de la política monetaria, creando un efecto sinérgico con la reducción de tasas. A pesar de que la Reserva Federal anunció una reducción de tasas el 29 de octubre, los rendimientos de los bonos del gobierno a largo plazo siguieron aumentando. Este fenómeno aparentemente ilógico revela la divergencia del mercado sobre la futura trayectoria de la política. Powell señaló que los formuladores de políticas tienen “serias divergencias” sobre las acciones de diciembre, lo que hace que la dirección futura de la política esté llena de incertidumbres. Sin embargo, el final de QT podría tener un efecto de apoyo más directo en el mercado de valores. El final de QT significa que la presión de la Reserva Federal para retirar liquidez del mercado se reduce, lo que brindará apoyo a las acciones estadounidenses, especialmente a las acciones de crecimiento y tecnología que son más sensibles a la liquidez. Este punto de vista coincide con la opinión de Bill Adams, economista jefe de la Dallas Federal Reserve Bank, quien cree que el final de QT podría “convertirse en más liquidez en los mercados financieros y más fondos de inversión privada fluyendo hacia activos de riesgo en el futuro cercano”. Un cambio sutil: el efecto de “reducción de tasas implícita” del final de QT.
Algunos analistas creen que, incluso si la Reserva Federal pausa las reducciones de tasas en diciembre, el final anticipado de la QT podría tener un efecto similar al de una reducción de tasas. John Luke Tyner, gerente de cartera de Aptus Capital Advisors en Alabama, incluso considera que terminar la QT antes de 2026 podría proporcionar a los inversores un efecto equivalente a una reducción de 25 puntos básicos. Este efecto de “reducción de tasas implícita” se realiza principalmente a través de dos canales: primero, aliviando la presión básica sobre las reservas bancarias, y segundo, gestionando la oferta y la estructura de plazos de las emisiones de deuda del gobierno. El final de la QT significa que la Reserva Federal comprará parte de la oferta de deuda del gobierno directamente del mercado privado, cambiando el equilibrio de oferta y demanda del mercado. Sin embargo, no todos los analistas están de acuerdo con esta comparación directa. Derek Tang, economista de Washington Policy Analysis, sostiene que el final de la QT amplifica cualquier efecto de reducción de tasas al “fortalecer la aversión al riesgo en el mercado de valores”, pero considera que este movimiento de la Reserva Federal es más un “ajuste gradual” de la política del balance. La decisión de terminar la QT también está estrechamente relacionada con la estrategia de emisión de deuda del Tesoro de EE. UU. Will Compernolle, estratega macroeconómico de FHN Financial, señala que, tras el final de la QT, el Tesoro tiene mayor flexibilidad para aumentar el saldo de efectivo de su cuenta general, mientras que la Reserva Federal se convertirá en un “comprador voluntario, absorbiendo parte de la demanda de deuda del gobierno”.
Efectos de la liquidez del dólar en el ámbito global
El cambio en la política monetaria de la Reserva Federal nunca es solo un asunto interno de Estados Unidos; su efecto de contagio tendrá un profundo impacto en los mercados de capitales globales. La experiencia histórica muestra que el endurecimiento de la política monetaria de la Reserva Federal a menudo se acompaña de crisis financieras en mercados emergentes o a nivel global. Sin embargo, el final de esta ronda de QT podría ser beneficioso para los mercados emergentes. El cese de la flexibilización cuantitativa por parte de la Reserva Federal aliviará la presión de fuga de capitales que enfrentan los mercados emergentes, lo que ayudará a mejorar su entorno de financiamiento externo. A medida que se reduce la presión sobre la liquidez del dólar, el capital internacional podría volver a fluir hacia los mercados emergentes en busca de mayores rendimientos. La evolución del índice del dólar también se verá afectada. La reducción de tasas de interés que lleva a un estrechamiento de los diferenciales de interés entre Estados Unidos y el extranjero, debilitará aún más la atractividad del dólar, sumado a la “desdolarización” impulsada por las tensiones comerciales globales, lo que aumentará la presión sobre el índice del dólar. Este juicio es consistente con las predicciones de Franklin Templeton Investments, que anticipan que las preocupaciones sobre la inflación llevarán a que la magnitud de la reducción de tasas de la Reserva Federal sea inferior a lo esperado, y que el rango objetivo final de la tasa de política de esta ronda podría ser superior al 3.5%. El mercado de materias primas podría mostrar una tendencia divergente. El oro se beneficiará de la caída de las tasas de interés reales y el resurgimiento de la demanda de refugio, y su precio podría seguir aumentando; los precios del petróleo, por otro lado, seguirán siendo determinados por los fundamentos de oferta y demanda, la capacidad de implementación de los recortes de OPEP+ y los riesgos geopolíticos en Oriente Medio seguirán siendo las variables clave que determinen la dirección marginal del precio del petróleo, y el impacto de la reducción de tasas probablemente será relativamente limitado. Perspectivas futuras: la niebla del camino de políticas.
A pesar de que el QT está a punto de finalizar, el camino de política futura de la Reserva Federal sigue siendo incierto. Powell dijo en la conferencia de prensa posterior a la reunión de octubre que hay diferencias evidentes entre los funcionarios sobre cómo actuar en diciembre, y no es seguro que se reduzcan las tasas nuevamente en la reunión de diciembre. El calendario publicado en el sitio web de la Reserva Federal muestra que en 2025 habrá otra reunión de tasas de interés, que anunciará una nueva decisión de tasas el 11 de diciembre a la hora de Pekín. Esta reunión será más importante, ya que puede proporcionar más pistas sobre el camino de la política en 2026. Las predicciones de las principales instituciones sobre la dirección de la política futura de la Reserva Federal son divergentes. Morgan Stanley pronostica que la Reserva Federal continuará reduciendo las tasas hasta enero de 2026, y que habrá otras dos reducciones en abril y julio de 2026, llevando finalmente el rango objetivo de la tasa de fondos federales al 3.00% al 3.25%. Por otro lado, un informe de CICC sostiene que, bajo “circunstancias naturales”, se estima que la Reserva Federal aún tiene espacio para tres reducciones de tasas en esta ronda, lo que corresponde a tasas a largo plazo de 3.8 a 4.0%. La compañía también indicó que, aunque la Reserva Federal aún tiene cierto margen de flexibilización, el ritmo de las reducciones de tasas podría desacelerarse, y no es prudente tener expectativas excesivamente optimistas. Nuevas incertidumbres también están surgiendo. CICC señala que el nuevo presidente de la Reserva Federal y la independencia de la Reserva Federal son los mayores factores de incertidumbre en el camino de reducción de tasas del próximo año, lo que podría aumentar la incertidumbre política después del segundo trimestre de 2026. Este punto de vista sugiere que los factores políticos podrían tener un mayor impacto en la dirección futura de la política monetaria.
Los fondos del mercado monetario han alcanzado un récord de activos de 7.42 billones de dólares, cifra que refleja el deseo del mercado por rendimientos y la búsqueda de activos seguros. Tras el final de QT, estos gigantes de capital que han estado inactivos podrían reajustar su estrategia en busca de nuevos hábitats. La Reserva Federal finalizará el plan de QT el 1 de diciembre, pero Powell también ha dejado claro que no es seguro que haya un nuevo recorte de tasas en la reunión de diciembre. Esta actitud cautelosa es, en sí misma, un espejo que refleja el difícil equilibrio que enfrenta la Reserva Federal entre la inflación y el crecimiento, la falta de datos y las perspectivas de políticas. El telón del festín de liquidez se ha levantado lentamente, pero la duración del banquete y el efecto final dependerán del rumbo definitivo de los fundamentos económicos.