Un cambio regulatorio importante ocurrió a finales de 2025 cuando la CFTC clasificó formalmente a Solana como una mercancía, estableciendo su marco de supervisión a través de productos derivados aprobados. Esta clasificación tiene implicaciones significativas para el mercado de EE. UU.: SOL ahora está sujeto a regulaciones contra el lavado de dinero, alineándose con los estándares más amplios del mercado de mercancías. La medida de la CFTC cristaliza efectivamente el estatus regulatorio de SOL, tratándolo con los mismos requisitos de cumplimiento que las mercancías tradicionales. Para los traders y proyectos que operan en jurisdicción estadounidense, esto significa una supervisión más estricta en los patrones de trading y la prevención de manipulación del mercado.